Diversidad, bello color de la vida. Tú, eres Tú, Yo soy Yo, y ambos, del mismo cristal trasparente del universo. El amor, palabra silenciosa en el trino de un vuelo.
Nosotros, compensación en el arco iris del fluir. Yo existo, porque tu existes. Yo Soy, porque Tú Eres.
Sociabilidad, expresión del corazón en la diversidad. Ser y Estar, contemplación del TODO.
Entre el cielo y el mar, el azul armónico que divide el espejo del Cosmos.
Entre el agua y el aire, el delfín sonriente. Amor entre azules, entre los tules esenciales de la existencia bendecida.
De amores los colores, de flores los corazones.
La naturaleza un lienzo exuberante, con las líneas perfectas de la esencia divina.
La Unión del amor crea Mundos, Universos, Vidas, La Vida.
Dar y compartir. Ser y Estar.
Yo y Tú, nosotros.
Macro, Micro Cosmos. Desde una estrella a un flor. Desde el mar al viento, de la palabra al silencio,
desde el Todo en la hondura del corazón, el instinto penetra en cada criatura, en cada boceto de amor.
¿Qué es importante, frágil o fuerte?
¿Qué es necesario, o carece de importancia?
Secuencias de percepción según la ceguera del alma...
Todos, nos necesitamos.
La belleza, es el fuego del espiritu, que con el el calor de la brasa...armoniza el amor en este vasto TODO,
donde todos somos vida y amor.
La soledad es un recorrido, para descifrar el YO...para descifrar el Tú.
Nada existe por casualidad.
Gracias por existir.
El tiempo seduce el canto de la vida.
El misterio un sendero que desvela a golpe de fidelidad su enigma.
Somos y estamos. Existimos por la razón del otro, espejo de un yo, que se diluye en la experiencia,
conectados trascendemos los abismos en la planicie del ser...
existo porque existes, soy porque eres...
La flor emerge, de la tierra sustentada por el cielo,
capricho divino, en alas del color y la fragancia.
La montaña repliega con su osamenta de roca, las aguas y el viento
que florecen en la esencia de toda vida.
Dormimos en un sueño donde cada cual, es cada quien. La naturaleza, su existencia con vivos colores, nos recuerda: El mundo multiplural. Donde todos somos con una vida conexa.
Ellas son, yo las contemplo, ellas catalizan el amor que habita en mi interior. La belleza desde lo pequeño a los más grande, respira con latidos de: Gracias, por existir.
Toda una vida, en un grano de arroz, toda una vida en una mariquita, toda una vida en el espacio sideral, y toda una vida para contemplar la dicha, de toda existencia nacida.
Yo soy tú, tú eres yo.
Mi corazón aúlla por un sendero perdido,
y vienes a mí, con tu espíritu de amor,
para acompañarme en las noches de frío.
Quererte es conocer el amor sin reservas. Fidelidad y nobleza en cada aullido, en la mirada trasparente, fluido del corazón en el pelaje de un espíritu, que contempla la vida y es vida.
Si mi espiritu se inquieta, lo sabes,
a todo cuanto soy, lo sabes....
a todo cuanto quiero, lo sabes....
Nobleza y grandeza, es tu sino...
amor, es el eco de tu espíritu.
A menudo el amor es, una criatura salvaje e inocente.
Lo puede todo, lo conquista todo, lo es Todo.
Porque toda criatura enlaza su alma con los filamentos de su esencia.
Somos la esencia del amor...todas y cada una de las criaturas de este Universo.
Nobleza y libertad envuelven al espiritu. El Yo Esencial galopa por la praderas del universo. La vida es, la esencia del Todo manifestada en la belleza.
Ser, camino y meta de toda criatura nacida.
Amor, sentimiento universal. Libertad deseo y anhelo de toda criatura nacida. Compartir el hecho divino en toda esencia viva.
Volar, ser, estar, alma y espíritu en su magna dimensión del Todo.
Todos estamos conectados con el Todo.
Océano, matriz azul de vida.
Alma existencial, agua, fluido primero,
memoria del claustro materno.
Océano, espejo del cielo, espejo del Universo.
Luz marina, coral y algas,
criaturas divinas, surcando la inmensidad,
yo soy, porque tú, estas.
Azul como el cielo, azul como el mar
la orla divina, es amor y alegría.
Yo existo porque tu existes.
Grandes o pequeños, interior o exterior, un mundo dentro de otro, una matriz que acoge vida. Un Universo dentro de otro, un latido al unisono con la existencia del Todo.
El espíritu es el fuego salvaje,
indomable esencia de amor.
Frágil como un abrazo, y tierno, como los ojos iluminados.
En el árbol de la vida (cábala), la Sefitor Tiphareh (belleza), recoge las emanaciones de todas las virtudes del resto del árbol de la vida. La belleza es un plano superior donde reside el Amor. La Armonía y la paz es la imagen, de su perfecta emanación.
Ser y estar, el Uno con el Todo.
Los unos existimos porque existen los otros. Lo grande y lo pequeño, se conjuga en la belleza y en el amor.
Ser, es estar.
El Amor es un Reino, donde prevalece la esencia por encima de las formas.
La realidad, es cualquier plano proyectando la vida con amor.
El depredador es mental. El Amor es Universal
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